Pare de Sufrir

Quien sí está acostumbrado a sufrir en este torneo es el Sampdoria que tiene una linda lista de jugadores con un solo defecto: no asisten. Por lo menos los de mayor jerarquía futbolística. Una vez falta uno, una vez falta otro, otra vez faltan todos el caso es que en una vuelta completa no logra presentar su mejor plantilla. A ese mal se le agrega cierta anarquía innata de algunos, los nervios de otros, la testarudez de este, el histerismo de aquel. El cocktail está servido. El Palermo con su equipo de pocos titulares pudo ganarle con mínimas aprensiones a este Sampdoria de pocos titulares. Con garra, mística y mucha humildad, los rosados sacaron oro de las piedras. Safina a los 9 minutos recibe de Morena un balón regalado a este por un mal pase de los sampdorianos. Portero en desesperada salida, tiro preciso de Nicolo y pelota a las mayas. Luego el mismo Safina casi hace un gol de cineteca al recoger una pelota en tres cuartos de cancha y sin dejarla caer con un derechazo la estrella en el poste con el portero Sampdoriano como  estatua sin chance ni para pestañear. Por el otro lado cero coma cero. Solo una buena dosis de mala suerte al ver como los únicos tres jugadores que podían jugar defensa central se iban de la cancha. Uno, Montenegro por compromisos los otros dos, los Morochos Antelo que cumplían año ese día, se tironearon por primera vez en su vida el mismo día. (De que vuelan, vuelan). Abriendo la complementaria Di Prinzio por la lateral derecha entrega a Boucher un buen servicio y Boucher en velocidad siembra al defensa y cuando entra en el area manda un trallazo al siete totalmente imparable. Por cierto Boucher ha resultado impagable para Palermo. Cuatro goles en cuatro partidos, gran despliegue físico, buena intuición para el remate presencia, garra… y a falta de Boccitos buenos son Boucheres con tal que la pelota vaya dentro. Paolo Rigio tendrá que retocar el contrato de este jugador. Solo en los veinte minutos finales el Sampdoria consigue cuadrar el circulo de su desorden. Conquista el descuento con Galota de buena actuación en su debut, oprime al Palermo en su área. Obliga al portero Sergio Boccito a un par de paradas de clase y logra al menos salvar la cara con una derrota más honrosa. La liga es larga pero ya no lo es tanto. Si la Samp quiere estar en el play off tiene que comenzar a sacar sus balones y ponerlos a jugar.

El último partido entre Milan y Civitella no tuvo historia en cuanto los celestes se encuentran diezmados por lesiones y no pudieron ofrecer una adecuada resistencia a un equipo superior que le bajó seis goles. La solución para el problema Civitella la puede tener la CFI y los delegados de la categoría súper que en reunión formal aporten ideas para su reacomodo. A nadie le interesa ver que uno de los equipos se rezague por falta de jugadores. Lo que sí es seguro es que el problema no se resuelve con críticas de pasillo o recordando la derrota en la mesa de la Copa Navidad.